Juego del año 2016: mejor juego jugado en 2016… que no salió en 2016

Bueno, aquí está mi primer Top 5 de juegos jugados en 2016, en este caso los que no han salido en 2016. Hago esta extraña distinción por adaptarme a los cánones de esta industria armamentística que son los blogs sobre videojuegos, en la cual el GOTY debe ser un juego entre los lanzamientos del año. Tiene lógica, claro, pero como yo siempre digo, no soy un medio, sino un tío que escribe a veces sobre esto, así que voy a poner también el Top de los juegos que he jugado este año y no cumplen esos requisitos tan marketinianos.

Después de publicar los finalistas hace unos días, me he dado cuenta de que la cosa ha estado difícil de decidir en ambas categorías, aunque por motivos diferentes. En el caso que nos ocupa, los cinco títulos son muy buenos y lo he tenido complicado. Sí, me ha pasado lo contrario en la otra lista, pero todo llegará.

En qué me baso para decidir

En cuanto a la clasificación, debo aclarar los criterios que he seguido para elegir el juego. Para confeccionar esta lista he seguido un criterio fundamental: disfrute. El juego que más he disfrutado va primero. Y disfrutar es un concepto que no tiene por qué ser sinónimo de reírse o de ser feliz. Me pongo académico. Según la RAE, en su primera acepción:

Disfrutar

1. tr. Percibir o gozar los productos y utilidades de algo.

Así pues, después del rellenazo de rigor que el placer de escribir y cierto amor/odio por el SEO me otorgan, aquí va la lista:

Quinto puesto. Divinity: Original Sin (2015), jugado en PS4

Este juegaco no merecería estar en el quinto puesto de ninguna lista, porque es un título que consigue ser único en su especie sin hacer nada nuevo, lo cual es algo poco común y muy meritorio. Sucesor espiritual de Baldur’s Gate y Neverwinter Nights, este rolazo puro y duro con combates por turnos y un inventario inabarcable es un juego largo, desafiante y no apto para los amantes del gatillo fácil. Imposible que no me gustara muchísimo… Pero es que lo que viene a continuación en esta lista se las trae.

Cuarto puesto. Persona 4 Golden (2012), jugado en PS Vita

No me gustan las japonesadas nada de nada. Me dan bastante repeluco. Por eso creo que dice mucho de un juego como aquél que yo lo incluya en una lista como ésta. Fresco, novedoso y bastante sorprendente para un juego de 2008 remasterizado con algunos añadidos (el diseño de los menús es un pequeño detalle, pero me parece de un gusto brutal) Aunque se le notan los años a la hora de jugar, me entró fantásticamente bien y lo disfruté como un otaku más. Otro de rol para la saca.

Tercer puesto. GTA V (2014), jugado en PS4

Grand theft auto nunca fue lo mío. Soy más de otro tipo de historias y temáticas. Además, a veces me da la sensación de que no sé jugar a GTA. En un mundo a lo Westworld como este, no soy capaz de ser ni un poquitín malo, lo que me da la sensación de no sacarle todo el jugo a las enormes posibilidades de este título inabarcable y lleno de acción. Y cuidado, porque ni he entrado a GTA online, que debe ser uno de los mejores online existentes hoy en día, bien cuidado por sus creadores y con una comunidad fuerte. No se puede decir mucho más sobre este juegazo y así lo voy a dejar.

Segundo puesto. Diablo 3 (2014), jugado en PS4

Me dije a mí mismo durante una semana de vacaciones este año: ¡hey, vamos a hacernos un Cazador de Demonios!. Y ahí estuve, como un couch potato, empezando de cero, pasándome la historia y llegando incluso a jugar algunas Fallas Nephalem (modo de juego post-end game). Puedo decir dos cosas: primero que sí, tal y como dicen, el Cazador de Demonios es un personaje molón (esas lluvias de flechas, que gustico dan); por otro lado puedo decir que Diablo 3 estará en esta lista cualquier año que lo juegue… Y mas después de las novedades que le esperan en 2017. No puedo esperar.

Primer puesto. The Witcher 3 (2015), jugado en PS4

Finalmente he tenido que ser honesto conmigo mismo y rendirme a la evidencia. Este juego comencé a jugarlo tarde el año pasado, y aún así le otorgué el GOTY de 2015 en este blog. Pero lo reenganché con fuerza a mitad del año y me lo comí con patatas. Este, para mí, es el sucesor espiritual de mi amado Skyim. Un juego enorme, con mucho por hacer y que he exprimido hasta la última gota. De hecho, me quedé sin más misiones que hacer. Ni una. Las expansiones no las tengo aún y no las descarto para el futuro, porque el juego del amigo Geralt me ha supuesto unas 140 horas de juego que he disfrutado más que nada este año.

Está claro que lo mío ha sido el rol este año. Aún hay alguno más de rol en la otra lista, que veremos en unos días. Como siempre, estoy más que abierto a comentarios, ruegos, insultos y peticiones. Las leo aunque parezca que no.